La razón por la que Kate Middleton no ha dejado que sus hijos la visiten en el hospital

Ahora ya está recuperándose en casa, pero la princesa de Gales ha pasado quince días ingresada tras su cirugía abdominal. 

Kate Middleton, en coma inducido e intubada tras su cirugía abdominal: “Su vida ha corrido mucho peligro”

La razón por la que Kate Middleton no ha dejado que sus hijos la visiten en el hospital
La razón por la que Kate Middleton no ha dejado que sus hijos la visiten en el hospital / Getty Images

Están siendo momentos difíciles en la Casa Real Británica. El preocupante estado de salud de Kate Middleton y la operación de próstata de Carlos III ha acaparado la actualidad ‘royal’ de las últimas semanas y, aunque ambos recibieron el alta este lunes, todavía les queda una larga recuperación, especialmente en el caso de la princesa de Gales.

Dos semanas después de que se anunciara que se había sometido a una “cirugía abdominal programada” (se especula que fue una histerectomía, es decir, la extirpación del útero, aunque no ha habido confirmación oficial), la duquesa de Cambridge ha podido regresar a casa y reencontrarse, al fin, con sus tres hijos. Durante su estancia en The London Clinic, los pequeños George, Charlotte y Louis (de 10, 8 y 5 años respectivamente) no han acompañado al príncipe William en sus visitas al hospital ni un solo día, una circunstancia que ha desatado todo tipo de rumores, pero que tiene una explicación.

El príncipe Guillermo visita a su mujer, Kate Middleton

El príncipe Guillermo visita a su mujer, Kate Middleton, en el hospital

/ GTRES

Guillermo los lleva al cole y cuenta con ayuda de los abuelos y de la niñera

“No creo que ella quisiera darle más importancia de la que ya tenía. Ellos ahora la verán en casa y ayudarán y cuidarán a su manera”, ha revelado a People la biógrafa real Ingrid Seward. Y es que pese a que todos han intentado mantener la normalidad por el bienestar de los pequeños, el ingreso de Kate en el hospital ha tenido un gran impacto en el día a día de sus hijos. Según ha trascendido, el príncipe Guillermo se ha encargado de llevarlos al colegio estos días y ha contado con la inestimable ayuda de sus suegros, Carole y Michael Middleton, quienes se han volcado en el cuidado de sus nietos; así como con el apoyo de su niñera española, una figura imprescindible para los duques de Cambridge que se ha vuelto especialmente relevante en los últimos días. 

Además, durante su estancia en el hospital, Kate “estuvo conectada con ellos a través de FaceTime”, según ha explicado la experta en realeza británica al mencionado medio. Esta forma de mantener el contacto por videollamadas es algo que hacen habitualmente William y Kate en sus viajes institucionales, por lo que sus hijos están acostumbrados. 

Pero eso no es todo. Existe un motivo de seguridad por el que los dos príncipes y la princesa no han ido a ver a su madre a la clínica: “Por lo general, a los niños no se les permite visitar The London Clinic sin el permiso de la directiva por la seguridad de los pacientes y para mantener a raya las infecciones”, ha apuntado.

El reencuentro de Kate Middleton con sus hijos

Pero en este tiempo el bienestar de sus hijos ha sido una prioridad para la pareja real. De hecho, ahora que la princesa está de vuelta en casa, la familia ha decidido instalarse en su segunda residencia, Adelaide Cottage, en Windsor, porque se encuentra más cerca del colegio de los niños y, por tanto, les facilitará la logística familiar. "Estoy segura de que está completamente agotada, pero se recuperará bien", ha comentado Seward en línea con el escueto comunicado del Palacio de Kensington que afirmaba que “está progresando bien”.

Dada la discreción con la que se está tratando este problema de salud, la Casa Real no ha publicado detalles ni ninguna fotografía del reencuentro familiar, pero sin duda fue un momento muy emotivo para todos ellos. 

Lo peor ya ha pasado: según se ha publicado, Kate estuvo en coma inducido e intubadadebido a complicaciones en su operación, pero ahora ya está en casa recuperándose y rodeada de los suyos. No se espera que retome sus deberes públicos hasta después de Semana Santa y su marido ha despejado su agenda oficial para poder acompañarle en este delicado periodo de convalecencia, por lo que puede que estemos unos tres meses sin verles en compromisos y actividades institucionales. 

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