Han vuelto: los collares de eslabones grandes serán los nuevos reyes del otoño

El título de collar del momento está muy disputado. Frente al éxito de las gargantillas con iniciales o al 'boom' de camafeos y relicarios hace ya tiempo que empezó a sacar la cabeza otra tendencia que incluso Donatella Versace se animó a apostar por ella en su desfile otoño-invierno 2019 y Virgil Abloh diseñó una colección para Louis Vuitton que también la reivindica.

Los collares de eslabones piden acabar con el reinado del minimalismo que desde hace años impera en nuestro joyero al proponer piezas en clave maxi en forma de cadenas sobre las que incluso se colocan 'charms' de diferentes formas.

Pero, contra todo pronóstico, su modo de uso no pasa por lucirlo con la estética hip hop que los popularizó en los 90 sino que ahora pasan a ser el complemento perfecto para los looks de fiesta. Es más, funciona genial con un 'slip dress', un vestido satinado o uno vaporoso siempre y cuando éste sea liso para no desviar la atención.

El gran tamaño es la clave aunque, no te equivoques, el grosor no tiene por qué ir implícito. Entre las propuestas que ya empiezan a verse encontramos versiones de toda índole en las que se trabaja con diferentes anchos para que no se pierda su esencia pero tratar de ganar a todas esas adeptas a las que les cuesta verse con un collar XL que antaño era exclusivo de raperos.

Una nueva vuelta de tuerca a este clásico de la cultura urbana al que también puedes darle una oportunidad en forma de pulsera de cara a la temporada que se aproxima, ¿te animas?