Un viaje a Marrakech: descubre la colección SS24 Ailanto

Ailanto, un árbol ornamental conocido como “árbol del cielo”, es la marca creada por los hermanos gemelos Iñaki y Aitor, reconocida por sus estampados únicos, diseños artesanales y uso de materiales nobles. Su pasión por el arte y la belleza les lleva a volver la vista hacia la vanguardia de los mundos de pintores, escultores y paisajistas de los s. XIX y XX.

Su colección Majorelle, inspirada en el pintor francés afincado en Marrakech, es un tributo a los tonos tierra, verdes y azules de las medinas, de la arquitectura y el paisajismo de una ciudad inspiradora. Monos, vestidos largos, pantalones fluidos... Diseños que destacan por sus materiales y el proceso creativo, tanto técnico como manual.

Crear, idear, plasmar

El proceso creativo comienza con el diseño de los estampados, desarrollados mediante técnicas pictóricas como collage, témpera, acuarela y óleo. A partir de ahí, los estampados irán dibujando sus propios volúmenes. La autenticidad y la exclusividad de sus telas y estampados viene definida por un refinado gusto artístico y sus diseños, fluidos y versátiles, son perfectos para mujeres que buscan comodidad y estilo. Además, la firma apuesta por la producción local, mejorando el respeto al entorno y garantizando la sostenibilidad en todo el proceso.

Jacques Majorelle

En 1919 el pintor francés Jacques Majorelle (1886-1962), hijo del célebre artista ebanista y diseñador de Art nouveau, Louis Majorelle de Nancy, se instala en la medina de Marrakech (en aquel tiempo protectorado francés) enamorándose de sus luces, colores, olores, ruidos, arquitectura, habitantes, del zoco, de la kasbah.

Enamorado de la botánica, crea su jardín en torno a su casa/taller, de una vegetación exuberante donde anidan inmensidad de especies de pájaros.

Este jardín es una obra de arte viva en movimiento, compuesto de plantas exóticas y especies raras traídas de sus viajes por todo el mundo: cactus, yuccas, nenúfares, nympheas, jazmines, bougainvilleas, palmeras, cocoteros, bananeros, bambús, etc. adornado con fuentes, cuencas, chorros de agua, jarras en cerámica, alamedas y pérgolas.