Meghan Markle tiene el vestido perfecto para el entretiempo (y ya lo ha llevado en TODAS sus versiones)

Solo unas horas después de que <strong>Meghan Markle</strong>el príncipe Harry publicara una contundente carta en defensa de Meghan Markle tras su demanda a la prensa británica, la pareja real ha realizado una aparición matutina en el último día de su viaje por África.

Blanca, radiante y, en apariencia, ajena a la polémica, la duquesa de Sussex ha reaparecido junto a su marido tras seis días de actos oficiales por separado. Este miércoles sus agendas volvían a coincidir en Sudáfrica, donde se ha quedado junto al pequeño ArchieMeghan se ha quedado junto al pequeño Archie mientras Harry visitaba otros países cercanos.

A lo largo de la jornada visitarán el municipio de Tembisa para tratar el problema del desempleo entre la población joven en la zona, se reunirán con Graça Machel, viuda de Nelson Mandela, celebrarán una asamblea junto a representantes de diferentes negocios en el Alto Comisionado Británico y, por último, tendrán una cita con el presidente Ramaphosa en Pretoria.

Si durante el 'tour' Meghan ha optado por looks cómodos y básicos compuestos por prendas 'denim', zapatos planos y los vestidos premamá que estrenó durante su embarazo, lo cierto es que en el último día ha puesto el broche de oro optando por un estilo más sofisticado pero igual de apetecible. Además, con esta aparición la exactriz ha confirmado que la prenda más repetida en su maleta es también la más favorecedora para el otoño: sí, hablamos del vestido camisero.

En la última semana, la duquesa ha explotado todas las posibilidades de este tipo de piezas optando por diseños en diferentes colores y tamaños pero con una característica diferenciadora en común: el cinturón o lazo que ajusta el vestido a la silueta.

En color azul y midi en su primer día de viaje, en tono caqui y hasta los pies para visitar una mezquita, marino con botones a contraste en un acto de tarde, verde militar y por encima de la rodilla hace apenas 24 horas... Meghan Markle no ha dejado de apostar por los vestidos camiseros demostrando así que son una pieza todoterreno.

Esta misma mañana ha escogido un diseño de color blanco que ha combinado con salones de tacón 'nude' y unos grandes pendientes de color coral que elevan el resultado final.