Esto es a lo que Irina Shayk no se puede resistir cuando viene a España

Después de que el año pasado Irina Shayk se perdiese su cita anual con Pronovias debido a su reciente maternidad, este año no ha dudado en volver a España para asistir como invitada de excepción al 'fitting' de la colección atelier 2019. Esta vez, la modelo no se subirá a la pasarela pero estará presente en el 'front row' del desfile de la firma que además inaugura la Barcelona Bridal Fashion Week.

Ataviada con un mono negro confeccionado en 'crepé' y con encaje en la zona de las mangas y la espalda firmado por Pronovias, -un look que se convertirá en el más buscado por las invitadas de 2018-, Irina presentó junto a Hervé Moreau, director creativo de la firma, un avance de los nuevos diseños de novia para el próximo año. "Estoy encantada de estar de nuevo con Pronovias. Cada año presenta algo nuevo en sus diseños y colecciones, todo el mundo está emocionado por ver el desfile de mañana, que será muy especial", comentó Shayk.

La modelo está emocionada por regresar a España y, sobre todo, por volver a degustar su gastronomía. Y es que, tal y como ha confesado en su perfil de Instagram, cada vez que viene a nuestro país no puede resistirse a comer jamón serrano y pan tumaca, ya que fue lo primero que pidió nada más aterrizar en la Ciudad Condal.

"Hapiness look like that", escribía la modelo Irina Shayk en la imagen.

Además, en esta visita a España, Irina Shayk lució en su mano derecha un sospechoso anillo. De plata y adornado con una gran piedra verde rodeada de diamantes, que nos hace pensar que la modelo tiene planes de boda junto a su actual pareja, Bradley Cooper, ya que esta joya tiene madera de compromiso. Nosotras ya estamos oyendo las campanas de boda...