Las botas cowboy han vuelto con nuevas reglas

Cuando hace una década el boho chic era el estilo más buscado, muchas fueron las que se animaron a combinar sus faldas largas y vestidos de flores con un tipo de calzado que hasta ese momento asociábamos en exclusiva al territorio campestre, a los estilismos propios de la América más profunda o directamente al mundo del cine.

Las botas cowboy pasaron entonces a formar parte de nuestro día a día como ahora lo hacen los mules o los mocasines. Pero ya se sabe que la tiranía de la moda manda y cuando ésta quiso relegarlas a un segundo plano ya no hubo marcha atrás.

Por suerte para las amantes del estilo western, su regreso parece ser definitivo después de que hace más de un año empezaran a levantar cabeza gracias a creadores como Raf Simons o Stella McCartney.

No hay más que echar un vistazo a los 'street style' de las principales semanas de la moda para comprobar que no hablamos en vano. Eso y visualizar las colecciones de la temporada que estamos a punto de comenzar en las que encontramos modelos de estas botas para todos los gustos.

Porque no nos equivoquemos, no se busca la estética literal como si acabáramos de salir de un rancho de Texas o de un videoclip de Jessica Simpson, se trata de adoptar esta tendencia de forma que se encuentre con nuestro gusto sin que parezca que vamos disfrazadas (¿o es que quieres que tus amigos te hagan una intervención como a Ted Mosby?).

Estas nuevas reglas de afrontar su vuelta ha provocado que se haya huido en muchos casos de las líneas más puristas y se haya jugado con los colores (blanco y rojo serán los más buscados en los próximos meses), el alto de tacón e incluso los materiales para dar lugar a versiones que permiten ser llevadas prácticamente con todo tipo de prendas.

Falda midi y pantalones 'cropped' pueden ser tus grandes aliados junto con los siempre recurrentes vestidos, dispuestos a vivir esta transformación de las botas cowboy. Esta vez el manual de uso lo decides tú.