Cómo llevar el pañuelo con tanto rollo como Sara Carbonero

Si hay una experta en llevar el pañuelo de muy diversas formas, esa es Sara Carbonero. Y no lo decimos solo por la variedad de fórmulas que se le ocurren, también porque con cualquiera de ellas es capaz de presumir de estilazo. Durante la temporada otoño-invierno como más se lo vemos lucir es en formato bandana atado a la muñeca, pero en cuanto llega el calor es capaz de multiplicar su creatividad por diez y recurrir a él como un complemento más para su melena.

Salvo a modo pirata, a lo largo de los años se lo hemos visto colocar sobre su cabeza con el pelo suelto como si fuera una diadema y también a modo de cinta sobre la frente. Incluso nos ha enseñado que queda genial funcionando como un coletero.

La última de las maneras en las que ha decidido usarlo ha sido la que se ha convertido desde ya en nuestra favorita porque no puede tener más rollo la periodista con este accesorio acompañando a un moño.

Sara Carbonero ha compartido en su perfil de Instagram una imagen desde su pueblo, Corral de Almaguer, donde está ultimando sus vacaciones antes de la vuelta a la rutina y tras haber pasado unos días junto a sus hijos en Cádiz y otros en Galicia acompañada de su novio, el músico Nacho Taboada.

Desde el refugio de su hogar familiar se ha dejado fotografiar en un ambiente relajado mientras lee sobre la cama con un vestido blanco y peinada con un desenfadado moño alto deshecho cuyo compañero ha sido un pañuelo estampado.

Así se pone el pañuelo como Sara Carbonero

El proceso para acomodar el pañuelo sobre el cabello del mismo modo que Sara Carbonero es bien sencillo. Basta con doblarlo sobre sí mismo hasta dejarlo de una anchura de aproximadamente tres o cuatro centímetros y juntar ambas puntas en un nudo que quede oculto a la altura de la nuca tras el recogido.

De este modo, el resultado es como una cinta que cubre la parte dentral del pelo y permite que los mechones más rebeldes se escapen.

Una forma facilísima de llevar este accesorio durante el verano para iniciadas pero que no es incompatible con otras más arriesgadas como emplearlo como si de un top se tratara atado a la espalda o rodeando el cuello.