Oro y diamantes en tu piel

Utilizados y venerados por las civilizaciones antiguas gracias a sus propiedades exfoliantes y regeneradores de la piel, el oro y los diamantes se han convertido ahora en el último descubrimiento de las firmas de lujo que los incorporan a tónicos vitalizantes, bases de maquillaje iluminadoras, tratamientos intensivos o cosméticos con efecto peeling.

Auténticas joyas para la piel, que multiplican su eficacia gracias a la incorporación de tecnologías como la nanociencia, que se anuncia como la responsable de la revolución cosmética de los próximos años.

Un nano es la billonésima parte de algo. En una crema, esto se traduce en la reducción al mínimo de las partículas que la componen. Cuanto más pequeñas, más fácilmente asimilables por la piel, a través de la que circulan a toda velocidad hasta sus capas más profundas... para convertir en oro todo lo que tocan.

Oro

Iluminan, protege y regenera

No se necesitan grandes dosis de imaginación para sospechar que las partículas de oro espolvoreadas sobre el rostro aportan un brillo especial. En este hecho, constatable a simple vista, se inspiraron los científicos de Guerlain para crear Divinora, una base de maquillaje con partículas de oro de 24 quilates en suspensión, que transforman esas motas en la ansiada luminosidad de la piel.

Era la primera vez que una firma de lujo aprovechaba las posibilidades cosméticas de este metal precioso, cuyas virtudes vigorizantes, estimuladoras de la circulación y protectoras, se mencionaban por primera vez en el "Tratado de iniciación a la farmacopea china", publicado bajo la dinastía Ming. Ahora, Estée Lauder, Guerlain y Helena Rubinstein han unido la eficacia de la cosmetología actual a estos conocimientos ancestrales, para exprimir todas las posibilidades del oro en sus diferentes formas: micropartículas, coloidal o azul.

Diamantes

Exfolian y unifican la tez

No sé si serán, como dice la canción, los mejores amigos de una mujer, pero se están convirtiendo en nuestros mejores aliados para recuperar un aspecto radiante. Los diamantes en estado natural son el mineral más duro del mundo. Por eso es fácil suponer que, aunque en forma de polvos microscópicos, ejercen un efecto arrastre cuando se masajean sobre la piel.

Esto los ha convertido en uno de los ingredientes principales de los nuevos cosméticos dermatológicos con efecto ‘peeling’. «Eliminan células muertas, suciedad y otros restos de la superficie de la piel. Suavizan, aportan luminosidad y mejoran el tono del cutis», señala George Cioca, vicepresidente de I+D y creador de El Refinador Facial de La Mer (95 €).

Otras joyas

Perlas: Cara, cuerpo y cabello se benefician de las propiedades del ingrediente-joya más conocido. Su extracto es un activo revolucionario para regenerar la fibra capilar por dentro y abrillantarla y dejarla suave por fuera. Este efecto nutritivo y regenerador se aprovecha también en los tratamientos faciales, mientras que los corporales las incluyen entre sus principios activos para beneficiarse de sus reflejos irisados.

Ahora, YSL ha convertido un exclusivo pigmento de nácar-perla en uno de los ingredientes principales de su nuevo Serum Temps Majeur (250 €), desarrollado para aportar la máxima luminosidad al rostro y proporcionar un aporte extra de energía. Lo contienen: Seah Hairspa Pearl Recovery, de Schwarzkopf; Life Pearl, de Helena Rubinstein; y Cinema, de YSL.

Jade: Actúa de la misma manera que un potente exfoliante, casi como un microdermoabrasivo, pero sin presentar sus efectos secundarios. Lo contiene: Idealist Micro-D, de Estée Lauder (54,50 €).

A PRUEBA de estrellas

El tratamiento más lujoso del mundo sólo está al alcance de las estrellas de Hollywood, a las que la Diamond Trading Company invita a disfrutarlo durante la semana de los Oscar. Demi Moore, Nicole Kidman o Jennifer Love Hewitt son algunas de las afortunadas que se han beneficiado de este circuito holístico a base de diamantes de colores valorados en seis millones de dólares.

Incluye cuatro terapias con las que equilibrar cuerpo y mente. El ritual termina en un spa, rodeadas de brillantes. Después, cuando pisan la alfombra roja, las afortunadas irradian un brillo especial.