Beret: "La única opción viable en este negocio es ser uno mismo"

Dos mejor que uno. El cantautor sevillano acaba de sacar un nuevo tema, 'Sueño', junto a Pablo Alborán. En sólo cinco años ha logrado sumar 27 millones de escuchas.

Javier Beret

El cantautor Javier Beret.

/ Warner Music

Su éxito nació en internet y en solo cinco años ha logrado posicionar su música entre la más escuchada de España (gracias a su canal de Youtube). Su vida ha cambiado, su casa también -de hecho, la estaba amueblando aprovechando el confinamiento y el retraso de su gira hasta 2021-, pero él sigue siendo ese sevillano sencillo que sigue flipando un poco con todo lo que le está ofreciendo la vida.

¿Cómo surgió esta colaboración con Pablo Alborán, Javier?

Yo le conocía desde hace 10 o 12 años -mi hermana era súper fan y yo le admiraba- y, como también era de mi discográfica, de Warner y habíamos coincidido en un montón de eventos... al final surgió el tema. Fue algo mutuo: yo tenía parte de la canción 'Sueño' ya hecha y sabía que él quería colaborar conmigo y hablamos.

¿Y teníais ya prevista esta fecha de publicación?

La verdad es que a mí no me gusta programar nada, sobre todo a la hora de sacar tema, que al final siempre se va con prisas y se acaba haciendo mal. Como los dos estamos muy liaos, ha sido como ha ido saliendo. La pandemia no lo ha retrasado, porque grabamos el vídeo en febrero y hemos estado esperando la postproducción. Gracias a Dios, el confinamiento no ha afectado a ls redes sociales.

Los músicos os habéis convertido en los artistas más importantes en el confinamiento... ¿Has aprovechado para escribir mucho sobre lo que estamos viviendo?

La verdad que no. He escrito de todo, menos de la pandemia, te lo juro. Cuando empezamos la cuarentena, mis amigos me animaban a escribir sobre lo que estaba pasando... pero es que me tiene que nacer de dentro. Y no ha sido así. Aunque el hecho de estar en casa, dedicándome tiempo a mí mismo -hacía mucho que no tenía tiempo libre-, me ha permitido escribir sobre recuerdos de la gira, de lo que nos estamos echando de menos unos a otros... de la pandemia en sí no estoy hablando, pero sí de cosas que están muy cerquita.

'Sueño' habla del esfuerzo por ser mejores: ¿qué cambiarías de ti mismo?

Bua, soy muy impaciente. Cuando quiero hago, hago lo imposible porque pase ya. Así que yo creo que cambiaría eso.

¿Hasta dónde estarías dispuesto a llegar por amor? ¿Te cambiarías a ti mismo?

¡Qué va! Sinceramente, yo escucho el tema y cuando digo que yo cambiaría por esa persona, siempre hablo de algo pasado. La autoestima y el quererse a uno mismo está por encima de querer a otro. ¡Qué pesadilla el tener que cambiar constantemente para agradar a alguien! Yo no soy así y no, no cambiaría... el que me quiera, como soy. Que se apañen, que hay mucha gente en el mundo (risas).

Beret

El cantante acaba de retrasar su gira 'Prisma' a 2021.

/ Warner Music

En 2019 lanzaste 'Prisma', tu álbum de debut, el que te ha permitido subir súper alto. ¿Imaginabas esta acogida?

Nada, nada. De los 19 temas que hay dentro del disco, había algunos que ya habían salido antes y sabía que habían ido bien, pero quedaban muchos desconocidos, algunas colaboraciones... Son muchas canciones, 19, en las que te arriesgas a que te amen o te aborrezcan... Ha ido súper bien y de eso me he dado cuenta en los conciertos: la gente está cantando los nuevos temas incluso más que los viejos.

Después de sumar 27 millones de escuchas... ¿el éxito atenaza o da alas?

Da subidón. Es irónico, porque cuando empiezas con todo esto, uno piensa que tiene que salir en el videoclip de estar forma o hablar en las entrevistas de tal otra y después te das cuenta que eso te difumina totalmente, que vuelves para atrás. Yo no llevo mucho en esto, unos 5 años, pero te das cuenta de que la única opción viable es ser uno mismo. Si yo me dedico toda mi vida a hacer canciones que no siento o a responder cosas que no pienso, al fin y al cabo no estoy siendo yo. ¿Y de qué me sirve eso, si la gente quiere verme a mí?

Pero este cambio de vida, ¿ha influido en tus letras, ahora cuentas otras cosas?

Bueno, realmente sí, es obvio que, al cambiar de vida, mis letras cambian: ya no puedo salir a discotecas, me falta tiempo libre, tengo planificada toda mi vida... Es un poco chocante. Pero si lo dices porque hay más gente que me escucha y tengo más responsabilidad, pues sí que soy consciente de que hay miles de personas que están pendientes ahora y esperan algo bueno, pero no voy a cambiar por eso, para agradar a nadie. Hay que ser uno mismo siempre.

¿Qué ha sido lo mejor y lo peor de estos últimos cinco años?

Lo peor, la ansiedad. La padezco hace muchísimo tiempo (un Trastorno de Ansiedad Generalizada) y con todo esto, imagínate, una exposición enorme... La intento manejar con deporte, meditación e intentando olvidarla, porque nunca se cura. He aprendido a relativizar. ¿Y lo mejor? El mundo tan grande que se crea alrededor de un artista, del que ni yo mismo soy del todo consciente... la ilusión de la gente cuando anuncias un concierto, su preparación, muchos viajes... yo empecé en este mundo siendo técnico de sonido.

¿Eres de estudio o de escenario?

A ver... hay conciertos en los que desde el primer tema ya uno está nervioso y se pasa el tiempo pensando: bueno, a ver qué tal y otro que son bestiales... la sensación más grande que yo he tenido ha sido encima de una tarima. pero después estás en asa componiendo, en tu mundo y eso también me gusta mucho, pero me quedo con el escenario.

En tu primer trabajo has colaborado con un montón de artistas, ¿qué te aportan?

Admiro mucho a todas las personas con las que he colaborado. No sólo con Pablo, si no con Melendi... yo tengo 23 años, para mí él es... ya le escuchaba cuando era un moco de 8 años y él ya estaba en la cúspide, me ha acompañado a lo largo de toda mi vida; Vanesa Martín, que es una compositora increíble, Sofía Reyes, que ha sido todo un descubrimiento y hace poco fui a verla a Monterrey; Yatra, que me encanta y fui a verlo a Bogotá; DJ Nano, que descubrí hace dos años y es un artista brutal y una persona increíble... cada uno tiene su historia y es bonito porque no ha sido nada frívolo, nada para conseguir visitas. Todo ha sido muy orgánico.

¿Por qué los músicos te respetan tanto a pesar de no llevar activo demasiado tiempo?

Bueno, el respeto es muy relativo, te pueden poner buena cara y luego pensar otra cosa por dentro (risas). Quizás sea por mi edad, por las letras, la composición... realmente no lo sé. Respeto hay que tener porque sí, no porque uno sea buen o mal músico.

Empezaste autoproduciéndote tu música, ¿de dónde sacaste el dinero?

Trabajo con salario nunca he tenido, no he tenido tiempo en mi vida, porque empecé en esto con 17 años. Antes, lo máximo que hacía era estudiar y quedar con mis amigos (risas). Repetí primero de bachillerato -quería hacer una FP de ingeniero de sonido-, venía de una ESO muy heavy (entraba a las 8 de la mañana y salía a las 8 de la tarde) y le dije a mi madre que quería parar. Y justo ese verano, el canal de Youtube empezó a ir bien... y cinco años que llevo de gira.

¿Cómo crece un artista? ¿Esta última etapa en casa te ha hecho madurar?

Yo siempre voy a 300 km por hora y ahora he podido dedicarme a hacer todo lo que no podía por carecer de tiempo. Lo necesitaba. Después de comprar mi casa hace dos años, la estoy empezando a amueblar ahora, para de coña. Estoy poniendo sillas para poder comer (risas). Parar, tener este punto de control y poder dedicártelo a ti... miro para atrás y he normalizado algo que es increíble. Yo hablo con mis amigos y con mi familia y lo normal no es viajar cada dos semanas a una ciudad diferente de España o Latinoamérica. Había olvidado cosas tan simples como es reunirse con la familia a comer o con amigos a tomarse una cerveza. Estoy disfrutando de esa simpleza.

¿Cuál es tu hijo favorito, la canción que más te representa?

Ojalá: es una canción que enfrenta continuamente entre lo que debo y lo que quiero. La escribí en una etapa en la que me sentía así, pero me suele pasar cuando me desestabilizo un poco. Entre lo que la gente espera de mí y lo que yo realmente quiero.

Tags _

Síguele la pista

  • Lo último