Artlanza, un pueblo medieval dentro de otro pueblo construido por un solo hombre

Félix Yáñez es el artista que ha levantado en Burgos Territorio Artlanza, un curioso rincón a base de materiales reciclados que se conoce como "la escultura más grande del mundo".

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Territorio Artlanza
Territorio Artlanza / Instagram @territorioartlanza

Tras muchos años recorriendo las ferias de artesanía de Madrid y Castilla y León, la crisis económica de 2008 obligó a Félix Yáñez a buscar nuevas fórmulas de trabajo. El escultor llevaba ya un tiempo decorando el entorno de su taller de manera que atraía a muchos curiosos, lo cual hizo que se planteara ampliarlo. Se puso a recopilar materiales que pudieran servirle de las escombreras de los pueblos de alrededor y con ello iba construyendo lo que iba surgiendo, hasta que se corrió la voz y le empezaron a llegar donaciones de utensilios y elementos para que pudiera continuar su obra.

Así es como nació Territorio Artlanza, una recreación de un pueblo medieval castellano que se conoce como la escultura más grande del mundo y que se ha convertido en toda una atracción turística para quienes visitan Quintanilla del Agua, en el valle del Arlanza.

"Preveía la afluencia porque, al principio, cuando comencé con la plaza antigua, venía gente y regresaban, pero no lo hacían solos, venían con amigos. Entonces pensé que, si hacía más elementos, llegaría más gente, se correría la voz, como así ha sido", cuenta el creador de Artlanza al portal Burgos Conecta.

La escultura más grande del mundo

Este lugar de 30.000 metros cuadrados casi concebido como un parque temático supone todo un paseo en el que se para el tiempo por un pueblo medieval castellano en el que no faltan las típicas casas, tiendas y plazas, todo levantado con materiales reciclados.

"Empecé recogiendo cosas de casas viejas, porque tiraban los adobes, las puertas, ventanas, palos, maderos, piedras… y así fue hasta que concluí este pueblo medieval después de diez años construyéndolo", confesó Yáñez al medio Escapada Rural.

A la entrada está el taller en el que comenzó todo, espacio en el que Félix Yáñez realiza las esculturas de terracota que realiza exclusivamente por encargo; y después se van descubriendo las fachadas típicas castellanas, los museos y dos corrales de comedias, los cuales acogen un festival de teatro en los meses de verano. En ellos se organizan también encuentros de poesía, conciertos y talleres, e incluso está disponible para la celebración de bodas.

Tras casi 15 años funcionando, Artlanza acaba de inaugurar una zona infantil con casitas de colores y personajes de cómic como Mafalda, Obélix o Pedro Picapiedra que comenzó a construir en el 2020 tras el confinamiento.

Además, este espacio ha ido ganando terreno y cuenta también con su propia versión de la catedral de Burgos y algunos edificios representativos del valle del Arlanza realizados a base de azulejos.

"Siempre he tenido la suerte de hacer lo que me ha gustado. Cuando era escultor y ceramista hacía lo que me gustaba. Ahora la sensación es exactamente la misma, la de que estás creando algo de unos escombros, de unas ruinas y que a la gente le gusta y lo aprecia. La sensación de crear la sigo teniendo", ha confesado Félix Yáñez a Burgos Conecta.

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