Quizá prefieras máxima amortiguación o eres de las que se suman a la tendencia minimalista. Tanto si corres por ciudad o lo tuyo son las montañas, averiguar qué zapatilla es la que mejor se adapta a ti a veces no es tarea fácil. ¿Sabías que hasta hace dos siglos solo existían las hormas rectas y ni se distinguía el pie derecho del izquierdo? Actualmente las cosas han cambiado mucho, una zapatilla convencional se compone de mediasuela, suela, contrafuertes, lengüeta, horma, plantilla…¿Mucho lío? Ante tal cantidad de datos y de variedad de marcas es fácil perderse intentando encontrar la zapa perfecta. Pero no desistas, hemos venido para ayudarte. 

Para salir de dudas preguntamos a una experta en esto,  Beatriz Ros Blanco, atleta internacional y olímpica maratoniana, nos cuenta sus secretos "Lo más importante es elegirlas ligeramente más grandes que el dedo más largo del pie. Estos deben tener espacio y algo de movilidad para así evitar hematomas en las uñas y otros problemas durante la carrera". Otra opinión de una que sabe de qué habla, Tamara Sanfabio, atleta, entrenadora personal y campeona nacional de maratón en 2011, tiene claro cómo debe ser su zapatilla ideal: "Cómoda, estable, ligera y con buena amortiguación."

Mitigar el impacto del terreno sobre el pie, que  puede alcanzar diez veces el peso corporal, ha sido uno de los mayores retos de los expertos en biomecánica

biomecánicaYa que guarda relación directa con muchas lesiones. La flexibilidad, la tracción, el peso del calzado y la sujeción son también parte fundamental de las características claves para que la historia de amor entre tú y tu zapatilla llegue a buen puerto.

El atletismo y sus diferentes modalidades han propiciado a lo largo de los años varias modificaciones para adaptarse a las nuevas realidades, los materiales han evolucionado de la piel a los sintéticos y se han incorporado nuevas formas que se adaptan a nuestro pie, como el corte para acomodar el talón de aquiles o materiales como la rejilla, que aumenta la transpiración durante la carrera sin perder las propiedades de durabilidad. Todo ventajas.

Antes de decidirte por un modelo u otro debes tener en cuenta que es la zapatilla la que tiene que adaptarse a ti y no al revés.

Por eso es muy recomendable que saber más sobre tu y la forma de tu pisada. ¿Cómo? en un centro médico especializado donde podrán valorar tu musculatura y articulaciones, cadera y columna para realizar un diagnóstico preciso de posibles patologías y prevenir problemas antes de su posible aparición.

Cuando te hayas decidido , no importa si te estás iniciando o entrenas para la media maratón, debe ser específico de running; revisa el interior para comprobar que el acabado sea correcto y que la plantilla se ajuste bien y te proporcione el confort y la absorción oportunos.

Recuerda que puedes cambiarla si es necesario. Cuando las pruebes, anda un poco con ellas para ver qué sensaciones tienes y comprobar si es el número correcto. ¿Lo es? ¡Enhorabuena, por fin has encontrado la zapatilla con la que batirás todos tus récords! Tan solo hay un pero, y es que este amor no podrá durar eternamente. Un dato: por lo general, tus deportivas pierden un 5 por ciento de amortiguación cada 500 kilómetros de uso, y la suela empieza a perder propiedades cada seis meses o 900 kilómetros. Míralo por la parte positiva, ¡Será el momento de volver de shopping!