Tu nueva mascota es un cactus, la nueva moda de cuidar plantas en vez de animales de compañía

Ya en el 2000, Sandra Bullock, en la película “28 días” tenía que conseguir mantener viva una planta como barómetro de su rehabilitación alcohólica. Y aprendimos a perseverar con Jessica Brown-Findlay en “El maravilloso jardín secreto de Bella Brown” (2016).

Pero desde que el Huerto Leopoldo nos acercó la naturaleza a cualquier casa –diseñado por Marc Gispert, obtuvo en 2001 la medalla ADI-FAD al mejor diseño por su planteamiento fácil y moderno al adaptar un huerto a la ciudad–, le hemos cogido el gusto a tocar tierra y ver crecer cosas.

Últimamente, floristerías y gardens tienen clientes cada vez más jóvenes gracias a una generación que, económicamente, aún no piensa en tener hijos y que si viaja mucho no puede tener animales, pero sí asumir el cuidado de una planta.

Así que ahora coge fuerza una nueva tendencia: las plantas pasan a ser nuestras nuevas mascotas. Sí, sí, háblales, ponles música, límpiales las hojas. Nada más asumible de cuidar ni tan gratificante para el trabajo que requiere. El consejo: empieza por algún cactus o plantas crasas, y a medida que le vayas cogiendo gusto y te sientas más segura, ve ampliando tu "familia".

Además, en un mundo de likes e influencers, Instagram es una fuente de inspiración y consejos constante. Algunas plantas se ponen tan de moda que cuentan incluso con hashtags concretos. Una de las primeras influencers especializada fue la modelo Summer Rayne Oakes (@homesteadbrooklyn). También puedes sacar ideas en The Jungalow o Urban Jungle Bloggers. Y entre las cuentas españolas destacan Greenfluencers, Espaijoliu o Srta.Plantita.

Y volviendo al Huerto Leopoldo, si quieres ir un paso más allá, cada vez que te comas un aguacate, ciruelas, naranjas, etc, planta el hueso o las pepitas... algo crecerá.