Diseño de muebles para 'milenials': sencillo y práctico

Entre los primeros visionarios del mercado de los 'milenials' se encuentra el diseñador de origen argentino y ahora afincado en Australia, Alexander Lotersztain. Su preocupación por el destino de este potencial público le ha llevado a crear una marca de producto y mobiliario pensados exclusivamente en los 'milenias' –tampoco descarta el potencial público restante del mercado que quiera comprar sus muebles–. Se trata de piezas de mobiliario y complementos que han sido creados siguiendo la premisa de la funcionalidad como hilo conductor.

De este modo, y bajo el nombre de 'Les Basic', Lotersztain ha ideado sofás, lámparas, estanterías, mesas auxiliaries y una centena de productos en los que honestidad, materiales elementales, colorido neutro y formas sencillas forman parte de los ingredientes básicos de este nuevo concepto decorativo.

A este misma tendencia se incorpora la productora Checa Ton, cuya colección de asientos 'Casablanca', en la que destacan su sencillo diseño, sus coloridos tapizados y sus fáciles materiales, ofrece un producto joven, dinámico y, sobre todo, práctico. En esta línea también se sitúa la colección Valentina de GAN, un conjunto de dos piezas –asiento y alfombra– realizadas en punto de cadeneta y artesanalmente que siguen los parámetros de elaboración manual de las alfombras importadas de la India bajo la batuta de la diseñadora de la casa Alejandra Gandía Blasco.

Y hablando de diseño y jóvenes, no nos podíamos olvidar de Ikea, la empresa sueca que fue pionera en nuestro país en democratizar el término decoración entre la población más joven. Famosas son sus colecciones limitadas, en las que los suecos contratan a destacados nombres de diseño para que cree en exclusiva para la marca un conjunto de piezas únicas que estarán en las tiendas durante un tiempo limitado.

En la Feria del Mueble de MIlán han presentado un sistema modular de mobiliario, que se puede utilizar como sofá o como cama auxiliar, dependiendo de las necesidades de cada momento. Pero como ha confesado Dixon, última de las figuras contratadas: “Es una pieza importante, con un diseño básico, pero muy cuidado y con unas calidades excepcionales. Quiero crear con esta colección una especie de ecosistema que esté todo intercomunicado entre unas piezas y otras”.