El color blanco domina la mesa de Navidad

Después de años dominados por la presencia unánime del color y de la mezcla de tejidos, complementos y adornos para conseguir un escaparate súper llamativo, las mesas de Navidad recuperan el minimalismo y se rinden a la practicidad y el ambiente sobrio. Las vajillas blancas, de toda la vida, y las que aparecen con pequeños y sutiles detalles de color se complementan armónicamente con el cristal transparente, tan solo contrastado con una cubertería de acero o de tonos cobre. Acertadas composiciones verdes con hojarasca o las tradicionales ramas de abeto repartidas a lo largo de la mesa completarán una disposición elegante a la que se puede añadir una guirnalda de pequeñas luminarias para focalizar la atención.

Monocromo:

¿Quién no tiene una vajilla blanca en casa y una cubertería tradicional de color acero? Lo mismo sucede con la cristalería transparente. Son elementos de hábito entre nuestras adquisiciones. De todos modos, si se produce la circunstancia de esta carencia, el mercado 'deco' ofrece un sin fin de posibilidades, desde las propuestas más económicas como otras un poco más elevadas de presupuesto. Lo principal es que armonices toda la composición sobre la mesa. Rosenthal, que siempre ha destacado por sus acabados nobles y delicados, acaba de lanzar su colección 'Yule' en la que aparecen pequeños grupos verdes de ramas y semillas que puede funcionar muy bien. En su versión color 'soft', la colección 'Moon Cipango Blue' cumple perfectamente con estos cánones de buen gusto.

Diseño divertido:

En el mismo baremo de sobriedad, pero con un estilo un poco más divertido o jovial, los productos de la firma Alessi sobresalen por encima de otros muchos, sobre todo en los complementos que se pueden adaptar a esta estética. Sus candelabros, adornos y extras, todos en un destacado acero pulido y cromado, admiten aportes personalizados a esta decoración como las galletas de jengibre o los frutos secos distribuidos en cuencos. Unos toques de ramas de acebo con velas rojas resultarán perfectos.

Puntos de color:

La dinámica colorista la puedes conseguir también si elaboras unos pequeños árboles de papel con cartulinas en blanco y negro para distribuir por la superficie de la mesa, como aparece en la foto. También puedes optar por las composiciones que sugieren desde Maison du Monde, en las que añaden adornos de cerámica y de acabado metálico entre los platos y la cubertería. El guiño extra lo incorporas con una guirnalda de luces o con un cordón de luz de intensidad variable.

Goito Paradelo es editor de la revista 'online' MaterialSoul.