7 escapadas sin salir de España
La Gomera: Garajonay
La Gomera: GarajonayEste parque nacional es una reliquia de los bosques que poblaban el área mediterránea hace cinco millones de años. Árboles milenarios, de hojas como el laurel, te dejarán sin habla cuando desciendas por el arroyo de El Cedro. ¿Quieres saber cómo se vivía antes de las glaciaciones cuaternarias? No tienes más que adentrarte aquí. El monte Garajonay, que se levanta hasta casi los 1.500 metros en el centro de la isla, determina la escarpada geografía de La Gomera y sus carreteras de susto, donde cada curva es un mirador. Desde San Sebastián, la capital –con dos zonas de interés: la torre del Conde y los jardines del Parador, con vistas a la playa de la Cueva–, hay que tomar la carretera hacia Valle Gran Rey que pasa por el mirador de los Roques y llega al alto del Contadero. Allí nace el sendero de El Cedro: disfrútalo porque, además de bien señalizado, llega hasta la ermita de Nuestra Señora de Lourdes. www.lagomera.es
Almería: desierto tabernas
Almería: desierto tabernasEn Tabernas, al norte de la capital almeriense se halla el único desierto de Europa y, en él, los decorados donde se rodaron cientos de ‘spaghetti westerns’ en los años 60. Caminando por sus arenas, aún se recuerdan las escenas de Sergio Leone y suena la música de Ennio Morricone. Entre la sierra de los Filabres, al norte, y la de Alhamilla, al sur, el desierto de Tabernas es una hoya de areniscas en las que la erosión ha labrado escenarios idóneos para rodar películas del Oeste de bajo presupuesto. Más de 4.000 años de historia te observan cuando recorres la rambla de Tabernas hasta el poblado de Fort Bravo (6 km). De todos los decorados cinematográficos, el más entretenido de visitar es el mini Hollywood, hoy Parque Temático del Desierto de Tabernas Oasys. Si vas hacia el norte, no dejes de visitar el mirador de las Canteras de mármol, en Macael. www.almeria-turismo.org
Huesca: Rorau de Aiguallut
Huesca: Rorau de AiguallutEn el valle oscense de Benasque, al pie de los más altos Pirineos, las aguas recién fundidas del glaciar del Aneto saltan en una cascada espectacular. Después se las traga la tierra... hasta que aparecen en otro valle como por arte de magia. Para adentrarse en los Montes Malditos, los gigantes del Pirineo –el 80% de los picos de más de 3.000 metros que hay en la península–, comienza la caminata en el área de la Besurta. Cruza el río Esera y sube en fila india por la senda, cual película de Tarzán, hacia el Forau. Atravesando un bello bosque de pinos negros, en menos de una hora llegarás ante un hoyo grande como un estadio, donde las aguas del deshielo se cuelan bajo tierra tras una estrepitosa cascada. ¿Lo curioso? Que las aguas llegan hasta el vecino Valle de Arán. Si continúas por el barranco de la Escaleta, podrás verlas llenar el lago de Toro. Anímate a descubrir la villa de Benasque, el vecino caserío de Anciles, Eriste, Sahún, Liri y su docena de templos románicos diseminados por el valle. www.turismobenasque.com
Mallorca: Sierra Tramuntana
Mallorca: Sierra TramuntanaPasear por las montañas calizas del norte de la isla, como si fuéramos el archiduque Luis Salvador de Austria, que construyó el camino más bello de la sierra en el siglo XIX, o como Chopin, que vivió en Valldemossa un invierno imposible de olvidar, es un lujo desconocido. Con 208 playas y 20.000 amarres, es difícil pensar en Mallorca como en un destino de montaña. La de Tramuntana es una sierra afilada, de barrancos infinitos, encinares impenetrables y cimas luminosas que se extienden 90 km, desde la isla Dragonera hasta el cabo Formentor. Acércate a la villa de Valldemossa y echa a andar monte arriba desde Arxiduc: tras pasar por las ruinas del refugio de Luis Salvador, continúa dos horas hasta coronar el Puig Caragolí, desde donde se ve la bahía de Palma. No te marches sin visitar después la cartuja donde Chopin y la escritora George Sand pasaron el duro invierno de 1838.www.infomallorca.net
Girona: La Garrotxa
Girona: La GarrotxaEn esta comarca del prepirineo gerundense, muy cerca de Olot, casi medio centenar de volcanes permanecen dormidos entre insólitos hayedos, templos románicos y pueblos que se asoman a vertiginosos acantilados. Como solo han pasado 10.000 años desde la última gran erupción, este es el paisaje volcánico mejor conservado de la Península Ibérica, con veinte coladas de lava y cuarenta cráteres casi intactos, aunque tapizados de verde, porque en La Garrotxa llueve con asiduidad. El itinerario a pie más completo nace en Can Serra, a 4 km de Olot, camino de Santa Pau: una ruta circular de 11 km que recorre los bosques, como el hayedo de la Fageda d’en Jordà, y los volcanes más vistosos, como el de Santa Margarida, en cuyo cráter hay una ermita románica. Tres poblaciones muy recomendadas delimitan el parque natural: Olot, Castellfollit de la Roca y Santa Pau. www.parcsdecatalunya.net/garrotxa
Navarra: Zugarramurdi
Navarra: ZugarramurdiEn el Pirineo más occidental, lindando con Francia, hay numerosas grutas que hacia 1610 fueron guarida de brujas y contrabandistas. La de Zugarramurdi es la más grande, la más bella y la de más trágica historia. Mide 120 metros de largo por 12 de alto y está iluminada por las enormes bocas que el arroyo del Infierno ha ido horadando durante milenios en la roca caliza. La llaman la Catedral del Diablo y se cuenta que en ella se celebraban aquelarres, misas negras y actos de vampirismo, necrofagia y bestialismo. Esa es la conclusión a la que llegaron los inquisidores. ¿El resultado? Más de 300 personas implicadas y 11 de ellas ajusticiadas en la hoguera. Hoy en día es escenario de conciertos, simposios y ‘cuchipandas’ como el ‘zikiro-yate’, en el que se asa medio centenar de corderos. www.turismozugarramurdi.com