La Córcega de Laetitia Casta

Allí empezó todo, mientras hacía castillos de arena en la playa de Calvi, en Córcega. Un agente de Madison Models descubrió a Laetitia, con 14 años, y le propuso convertirse en modelo. Han pasado 23 y esta bella y salvaje isla francesa continúa siendo el refugio donde la Casta se escapa siempre que puede. Allí viven sus padres, Dominique y Line, en el pueblo de Lumio, en la gran casa del siglo XV en la que su bisabuela Zelinda trabajaba de gobernanta y que ella compró para disfrutarla con su familia. Su padre la restauró entera.

¿Qué representa Córcega en tu vida?

Mis raíces, la luz sobre la Balagne, los olores, la naturaleza, la generosidad de la gente, el sentimiento de pertenecer a un sitio, la familia, los amigos de siempre... Me escapo en cuanto puedo. Córcega me carga las pilas, me llena de energía. Allí soy feliz.

¿Qué queda de la joven que debutó en 2000 desfilando para Yves Saint Laurent?

Sigue siendo parte de mí. Cada experiencia me alimenta, me construye, me hace sentir viva. Me encanta aprender. Es mi motor. Soy mucho más fuerte y segura que cuando empecé. Así es la belleza y la riqueza de la vida. La vida es mi amiga. Hay que cuidarla.

Ahora eres madre de tres hijos , ¿qué valores importantes les has transmitido?

A ser independientes, a seguir su instinto y a ser siempre positivos.

¿Ahora dedicas tu vida solo al cine?

Principalmente. He empezado a escribir un guión y estoy ilusionada como una niña. Es un proyecto importante para mí. Además, colaboro con marcas con las que tengo afinidad, una historia que transmitir para cambiar las cosas, como con Cointreau.

¿Te identificas con esta casa, cuyos valores se basan en la creatividad y la innovación, desafiando las reglas? ¿Eres una rebelde?

¡Definitivamente, sí! Me salto los códigos y voy hasta donde nadie espera. Nunca aguardo a que pasen las tormentas, aprendo a bailar bajo la lluvia, retomando a Séneca.

¿Por qué elegiste ser directora creativa de Cointreau y no solo la imagen?

Al principio les dije que no, pero descubrí una maison apasionante... con una gran mujer detrás: Louise Cointreau, que se batió como una leona por la libertad de las mujeres, para que pudieran elegir su camino. Era una gran mecenas y ese es el compromiso que yo he adquirido con la marca al ser nombrada directora creativa.

Has creado la Cointreau Creative Crew...

Sí, es un programa de becas para ayudar a las mujeres a rebelarse explorando su creatividad. Está abierto a todas las que nos presenten un buen proyecto creativo. Empezará en septiembre; es una acción muy poética, pero concreta a la vez.

Más Pistas

Calvi es una localidad situada en el noroeste de la isla gala de Córcega, en la región de Balagne, donde nació Cristóbal Colón. Sus 5.000 habitantes exhiben con orgullo la Citadelle, ciudadela de origen genovés. También tiene una capilla del siglo XVI, L’Oratoire Saint-Antoine.

Dónde alojarse: Hotel La Villa. Es un Relais Château adosado a una colina. Sus vistas son tan maravillosas como sus habitaciones. Merece la pena cenar en su restaurante, La table de Bastien (con estrella Michelin). Dónde: Chemin de Notre Dame de la Serra, Calvi. hotel-lavilla.com

Dónde comer: U Calellu. En el puerto de Calvi, restaurante liderado por Olivier Massenez, que propone una deliciosa carta con productos del mar. Dónde: Quai Landry, Port Landry, Calvi. A partir 50 €. Place Marchal. Hermosa plaza con restaurantes.

De tiendas: Boutique Benoa. Ropa y complementos femeninos creados por dos diseñadoras corsas. También tienen tienda en île Rousse y Saint-Florent. Dónde: 40, rue Georges Clamenceau, Calvi. Rue Clémenceau. Es la calle principal de la Citadelle. Peatonal, es ideal para comprar artículos artesanales como cestas o sombreros de paja. O productos gourmet como vino o mermelada. La ruta personal de Laetitia

Un restaurante: U Libecciu (Rue Notre Dame, Île Rousse). ¡Inolvidable!

Una excursión: Partiendo de Lumio, un paseo hasta las ruinas de Occi, que tiene unas impagables vistas sobre la bahía de Calvi. Laetitia ha participado personalmente en la rehabilitación de su ermita.

No te pierdas... Visita una bodega de vino corso, la Cave du Clos, en Coulombu (Chemin San Petru, Lumio).