Emilia Clarke sufrió dos aneurismas trabajando en 'Juego de Tronos': "Pedí que me dejaran morir"
La actriz ha dejado estupefactos a sus fans con su relato más angustioso.
"Justo cuando mis sueño de la infancia estaban haciéndose realidad, casi se me va la cabeza y, luego, la vida", ha explicado Emilia Clarke a 'The New Yorker' en unas declaraciones que han dejado boquiabiertos a sus millones de seguidores. Porque, entre otras cosas, la actriz que interpreta a Daenerys en la serie <strong>,</strong> el gran fenómeno de HBO'Juego de tronos', el gran fenómeno de HBO, sufrió dos aneurismas desde que comenzó a trabajar en la serie, hace unos nueve años. Y lo ha contado con todo lujo de detalles a este medio, que ha eliminado la figura del entrevistador para la ocasión y ha dejado que el relato -estremecedor- de Emilia llegue a los lectores directamente, sin filtros.
Así lo cuenta la actriz:
"Era principios de 2011. Acababa de terminar el rodaje de la primera temporada de 'Juego de Tronos' (...). Sin casi experiencia profesional a mis espaldas, me habían dado el papel de Daenerys Targaryen, la madre de los dragones, (...) comenta la intérprete británica de ese personaje que constituye uno de los grandes protagonistas de la ficción que ha logrado superar todas las expectativas de HBO.
"Para aliviar el estrés, trabajaba con un entrenador. Me había convertido en una actriz de televisión y eso es lo que los actores de televisión hacen. Entrenábamos. En la mañana del 11 de febrero de 2011, me estaba cambiando en el vestuario del gimnasio en Londres cuando empecé a sentir un gran dolor de cabeza. Estaba tan fatigada que casi no me podía calzar las zapatillas. Cuando comencé a entrenar, tuve que esforzarme mucho para hacer los primeros ejercicios", cuenta la intérptete, que luego explica que al adoptar una determinada posición, sintió un latigazo de dolor en su cerebro.
"Traté de ignorarlo y continuar pero no pude. Le dije al monitor que tenía que tomar un descanso. De alguna manera, casi a gatas, llegué al baño, me puse sobre las rodillas y empecé a encontrarme fatal (...). Mientras, el dolor iba a peor. Llegó un punto que supe que mi cerebro estaba mal".
El relato de Emily continúa con sus esfuerzos por no quedarse paralizada ante lo que sucedía, moviendo sus dedos e intentando mantener su memoria activa recordando una parte del guion de 'Juego de Tronos'.
"Oí una voz de mujer que venía de la siguiente cabina preguntando si estaba bien. No, no lo estaba. Vino y me ayudó (...). Luego todo se vuelve ruidoso y borroso. Recuerdo el sonido de una sirena, una ambulancia".
Así es el angustioso relato de Emilia Clarke sobre la primera aneurisma que sufrió. Afortunadamente para ella, su historia tuvo un final feliz y fue rápidamente atendida, ya que "una tercera parte de los que la sufren muere inmediatamente o poco después de que sucede".
Además, la actriz nos recuerda lo prioritario que es que en esos momentos se te administre el tratamiento adecuado ya que hay un alto riesgo de sufrir una segunda aneurisma, que muchas veces es fatal.
Todo ocurría en el peor momento posible para la actriz de 24 años: "Recuerdo que me dijeron que tenía que firmar una autorización para una cirugía. ¿Cirugía en el cerebro? Estaba a la mitad de mi aocupadísima vida, no tenía tiempo para algo así. Pero finalmente lo firmé. Y después caí inconsciente."
La operación para "reparar el cerebro" duró tres horas y cuando se despertó "el dolor de cabeza era insoportable". Pero esa no fue ni su última operación ni la peor, recuerda Emilia, que no había tenido antes ningún problema de salud.
La entrevista, que ha dejado estupefactos a los lectores de The New Yorker y a los seguidores de la serie (y que también recoge cómo la actriz sintió su vocación desde muy pequeña, pero no llegó hasta 2010 cuando su agente la llamó para que fuera a unas audiciones en Londres de una serie de HBO), explica cómo cuando cuando estaba convaleciente tras su primera cirugía, Emilia Clarke sintió durante un momento pánico. No podía recordar bien su nombre. "Veía mi vida delante de mi y no merecía la pena vivirla", es una de sus declaraciones más escalofriantes. "Soy actriz, necesito recordar mi texto. Y no podía".
En ese momento, Emilia no sabía que estaba sufriendo afasia, una consecuencia del trauma que su cerebro había sufrido. "Le pregunté al equipo médico si podían dejarme morir (...). Mi trabajo, el sueño de mi vida, se centraba en el lenguaje, en la comunicación. Sin eso, estaba perdida".
La afasia finalmente pasó y Emilia se recuperó a tiempo de atender las entrevistas de promoción. Pero antes de salir del hospital, le advirtieron de que tenía otra pequeña aneurisma en el otro lado de su cerebro y que podría "explotar" en cualquier momento.
Luego llegaron más entrevistas y los dolores a veces se intensificaban y tenía que combatirlos con morfina. Se sentía muy insegura. Y la segunda temporada de 'Juego de Tronos' fue, para ella, "la peor". "No sabía ni lo que Daenerys estaba haciendo. Cada minuto de cada día estaba pensando que iba a morirme", ha declarado.
En 2013, cuando se encontraba en Nueva York por una obra de teatro, un scaner reveló que la aneurisma había duplicado su tamaño. Se sometió a una "breve intervención" pero algo falló. Hubo que operarla de urgencia, con una cirugía mucho más agresiva. La recuperación fue incluso más dolorosa que la primera.
"Ahora ya no se ve la cicatriz que va desde mi cráneo a la oreja, pero al principio no sabía que no se vería", recuerda angustiada. Tampoco sabía si tendría memoria, visión... Una parte de su cráneo había sido reemplazada por titanio.
Afortunadamente, Emilia se recuperó. Y hoy es conocida por su gran sentido del humor, del que da numerosas pruebas en su Instagram.
"He sobrevivido", concluye Emilia, refiriéndose tanto a su vida como a la serie en la que solo unos pocos pueden presumir de lo mismo. "Estoy tan feliz de haber visto el final de esta historia y el principio de lo que sea que venga", se despide, en su relato más turbador.
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