Oscar de la Renta, gloria compartida

Curiosamente, el exdirector creativo de Dior no asistió al desfile, aunque sí lo hicieron algunos diseñadores amigos de ambos, como Diane von Fürstenberg. Sin embargo, su presencia se intuía perfectamente en la colección, por ejemplo en los sombreros de lana acampanados o en los cinturones de cuero que ceñían multitud de chaquetas y abrigos.

En la pasarela se movían con absoluta libertad desde prendas al más puro street stlye como faldas lápiz y trajes sastre (en negro, verde azulado y berenjena), hasta diseños mucho más sofisticados como vestidos muy armados y de formas trapezoidales cargados de brocados. También pasearon únicas bordadas de inspiración oriental y vestidos con encajes y transparencias, además de un abrigo de piel de zorro llevado con absoluta elegancia con guantes hasta el codo (este último, sin duda un capricho "made in Galliano").

Y como colofón final, algunos diseños de noche con pronunciados escotes y tejidos brillantes, que se combinaban con un maquillaje marcado por una profunda mirada de khôl.