El mejor restaurante de menú del día al lado de la Academia militar de Leonor en Zaragoza

Faro de la auténtica cocina aragonesa, mantiene recetas y técnicas culinarias transmitidas de generación en generación y se sitúa enfrente de la Academia General Militar

La familia real durante una comida en
La familia real durante una comida en / Gtres

El restaurante Torrejón se ha convertido en objeto de todas las miradas desde que la princesa Leonor empezase su formación militar en la Academia General Militar de Zaragoza. Se trata de un establecimiento culinario situado en el corazón de la ciudad que cuenta con más de medio siglo de historia y es famoso por su exquisita cocina tradicional aragonesa y su compromiso con la autenticidad de los sabores regionales.

¿Lo mejor? Que está al lado de la academia donde la princesa estudia. ¿Habrá ido ya la heredera al trono a degustar su conocido menú diario? Nos adentramos en el restaurante para descubrir todas las opciones culinarias que nos ofrece.

Leonor

La princesa Leonor en la Academia Militar de Zaragoza

/ GTRES

Sus platos emblemáticos

El secreto de la fama de este restaurante reside en su carta, que ofrece una selección de platos tradicionales que capturan la esencia de la cocina aragonesa. Entre sus platos emblemáticos se encuentran:

  • Cordero a la Pastora: Una tierna preparación de cordero cocinada lentamente con hierbas aromáticas y servida con patatas. Un plato que rinde homenaje a la rica tradición pastoril de Aragón.
  • Ternasco de Aragón: El ternasco, una variedad de cordero, se asa al horno con ajo y romero, creando una deliciosa y crujiente piel con una carne tierna y jugosa en su interior.
  • Borrajas con Jamón: Borrajas, una verdura autóctona de la región, se saltean con jamón ibérico para dar vida a un plato lleno de sabor y textura.
  • Migas a la Pastora: Un plato humilde pero sabroso, las migas se preparan con pan, ajo, panceta y pimiento, creando un bocado reconfortante que evoca la historia culinaria de la región.
Restaurante Torrejón

El local, faro de la auténtica cocina aragonesa

/ Restaurante Torrejón

Su ambiente, fama e historia

El restaurante Torrejón no sólo deleita los paladares, sino que también ofrece un ambiente encantador y súper acogedor. Sus interiores están decorados con elementos rústicos y detalles históricos que crean un ambiente cálido y muy auténtico.

Ha sido visitado por personalidades nacionales e internacionales, desde políticos hasta celebridades del mundo del arte y la cultura. Su fama ha trascendido fronteras, y es común encontrar a turistas que viajan a Zaragoza especialmente para probar su cocina.

Además, su trayectoria cuenta con casi 50 años y por eso es también uno de los más conocidos de la ciudad. Nació en 1971 y lo fundó Pilar, una señora que comenzó vendiendo bocadillos y gaseosa a los trabajadores que construían el hipermercado Mercazaragoza. Ayudada por familiares, consiguió hacer crecer el negocio y crear una pequeña casa de comidas. Hoy en día se encargan de la gestión sus cinco nietos: Javi, Santi, Pili, Carmen y Toñín.

El menú diario del restaurante Torrejón

Hay muy pocos restaurantes en Zaragoza que cuenten con una oferta tan variada de platos a elegir. En él ofrecen un menú del día que incluye primero, segundo y postre, además de pan, vino, gaseosa y agua. Todo por sólo 13 euros. Pero lo mejor no es el precio, que también, sino que hay más de 50 platos a escoger, con 11 primeros, 21 segundos y 5 postres. "Disponemos de una multitud de opciones para que nuestros clientes siempre puedan encontrar algo que les apetezca tomar. Y por supuesto, si no sabes por lo que decantarte, estamos ahí para aconsejarte y asesorarte", aseguran desde la cocina.

A diario cambian 12 platos del menú con el objetivo de lograr una cocina súper variada y lo más equilibrada posible para sus clientes. La princesa Leonor también podrá probar sus almuerzos o desayunos tradicionales, que destacan por ser de lo más abundantes. Se encuentra a sólo 15 minutos del centro de Zaragoza. Además, es moderno, acogedor y con ambiente familiar.

Sin duda, un destino gastronómico imprescindible para los amantes de la auténtica comida regional y una visita al corazón de la cocina de Aragón.

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