Sándwich de colorete: el truco de una maquilladora para una piel saludable, luminosa y ultranatural

Ya sea en barra, en crema, en polvo o en gel, el colorete es un producto imprescindible durante todo el año. Y no solo porque es ideal para iluminar la piel y darle un brillo saludable, sino porque también se puede utilizar en los labios, los párpados y, a veces, incluso en las ojeras como corrector. Un producto realmente multifuncional que a veces requiere un poco de destreza para aplicarlo a la perfección, sobre todo cuando tiene mucha pigmentación.

Para crear un efecto de luminosidad natural y saludable con el colorete, la maquilladora Nam Vo ha popularizado una técnica que ella misma ha bautizado como "sándwich de colorete". ¿La clave? Una piel fresca y luminosa y un efecto rosado ultranatural en las mejillas. "Es como si el color del colorete saliera del interior de tu piel", explica. Te contamos todo sobre este truco de maquillaje que vas a querer probar esta primavera.

¿Qué es la técnica del sándwich de colorete?

El sándwich de colorete consiste en aplicar un colorete entre dos capas de base de maquillaje. Como se puede ver en el vídeo, la maquilladora aplica una primera capa de base en formato 'cushion' y, a continuación, coloca un colorete en barra muy pigmentado sobre los pómulos. Luego difumina el producto aplicando a toquecitos otra capa (muy fina) de base de maquillaje sobre las mejillas. De este modo, el color del colorete queda perfectamente difuminado, como si fuera transparente bajo la base de maquillaje. Un efecto luminoso muy sutil que da la impresión de una piel naturalmente sonrosada.

Para realzar el color del colorete y darle aún más luminosidad, Nam Vo aplica a continuación un colorete en polvo iridiscente. Esto añade un velo extra de luz e intensifica ese efecto de brillo saludable.

Para conseguir este look, necesitarás una base de maquillaje luminosa y de cobertura ligera y un colorete bien pigmentado, idealmente en barra, crema o líquido. El que ella usa es el Cooling Water Jelly Tint de Milk, que es ideal para esta técnica por su alta pigmentación y su efecto sin transferencia.

Algunos coloretes muy pigmentados u oscuros pueden ser difíciles de trabajar... Y a veces te aplicas demasiado colorete en las mejillas y no sabes cómo difuminarlo. Para crear un efecto más suave y difuminado, la técnica del sándwich de colorete también puede ser un buen truco en este tipo de situaciones. Una vez que hayas aplicado el colorete, pon un toque de base de maquillaje o corrector en las mejillas y luego difumina con una esponja o brocha. Así conseguirás un color más apagado y un resultado mucho más natural.