El perfume sólido y los pasos para aplicarlo que son la clave para oler bien todo el día (incluso en verano)

Con la subida de las temperaturas las fragancias que nos apetece llevar tienden a ser más frescas tirando hacia notas cítricas o con olores que nos transportan a un atardecer de verano. En esta época del año también aparece la preocupación por que el perfume aguante lo máximo posible ya que, muchas veces, después de esmerarnos con mil pasos en su aplicación, el sudor termina por eliminar todo el trabajo hecho. Ya hemos puesto a prueba algunos de los trucos populares que se proponen como solución a este problema, como por ejemplo aplicar vaselina en las zonas en las que vayamos a rociar nuestra fragancia preferida para que permanezca durante más tiempo sobre la piel. Sin embargo hoy venimos a explicarte que este paso, además de ser un poco incómodo, no es necesario: todo lo que necesitas en tu neceser es un perfume sólido.

Los perfumes sólidos no solo prometen durar muchísimo tiempo más en tu piel, sino que también son perfectos para llevarlos en el bolso o en tu estuche de viaje sin preocuparte por que se rompan, por su peso o por la cantidad de líquidos que puedes llevar al subirte a un avión. Además están hechos a base de aceites y ceras, que son los responsables de que el olor se adhiera mejor a tu piel, y suelen presentarse empaquetados en envases como pequeñas cajitas que pueden llegar a ser auténticos artículos de coleccionista.

Los mejores perfumes sólidos para este verano

Desde los famosos 'sticks' que son muy cómodos de aplicar hasta los que vienen en pequeños botes de formato viaje, este tipo de perfumes son perfectos por lo cómodos que te resultará llevarlos en el equipaje para tus escapadas veraniegas. Pero no solo duran más y son más fáciles de transportar, sino que también su precio es bastante más económico en comparación con el al resto de fragancias que hay en el mercado. Esto se debe a que no necesitan una concentración tan alta de la fragancia para obtener los resultados que deseas. Por si aún no has echado un vistazo a la variedad de olores y formatos que existen te dejamos una lista de nuestros perfumes sólidos favoritos para este verano:

• Perfume sólido de coco y yuzu, de The Body Shop

La marca The Body Shop ha sacado su propia gama de perfumes sólidos en la que podrás elegir entre varias fragancias, como esta de coco y yuzu u olores más frutales como el de granada y frutos rojos. Su precio es de tan solo 8 euros.

• Perfume sólido Vanillary, de Lush 

Lush es una de las marcas más comprometidas con la lucha contra el maltrato animal en el mundo de los cosméticos y un perfecto ejemplo de concienciación contra la creación de residuos que contribuyen al deterioro del medio ambiente. Por todo esto no podrías evitar sacar todos sus olores en versión sólida recargable. Uno de los más populares es este de vainilla, aunque hay disponible una amplia variedad de hasta 12 perfumes, cada uno por 13 euros.

• Perfume sólido Eau Capitale, de Dyptique

Esta fragancia se inspira en la técnica de 'enfleurage', utilizada en tiempos pasados para captar el principio del olor de las flores. Su cera sin alcohol es un bálsamo perfumado que se aplica con las yemas de los dedos, revelando la intensa fragancia de la rosa chypre de Eau Capitale. El estuche está decorado con ilustraciones florales y sirve para que puedas recargarlo cuando gastes todo el producto. Su diseño exclusivo justifica que sea el perfume sólido más cara de nuestra lista con un precio de 55 euros.

Los trucos para conseguir que tu perfume (sólido) dure más

• Atempera un poco el producto masajeándolo en la yema de tus dedos para que se derrita.
• No desperdicies perfume. Para que este tipo de perfumes sean efectivos no necesitas más que la cantidad del tamaño de un guisante. Con esto será suficiente para aplicar en todo el cuerpo.
• Póntelo justo después de la ducha aprovechando que los poros están más abiertos y la fragancia penetrará mejor en la piel.
• Zonas para aplicarlo. Las partes clave para desprender buen olor durante todo el día son las muñecas, detrás de las orejas, en el interior del codo y la rodilla (justo donde se cierra la articulación) y por debajo del pecho, el obligo y la nuca.